Ya disponible el segundo capítulo
Un muerto flotando entre tiburones: un nuevo y misterioso caso para Luis y Naira
Ya está disponible el segundo capítulo de Una vida menos en Canarias, serie centrada en dos policías totalmente opuestos en todo y condenados a entenderse para resolver los casos.
![Un muerto flotando entre tiburones: un nuevo y misterioso caso para Luis y Naira Un muerto flotando entre tiburones: un nuevo y misterioso caso para Luis y Naira](https://img-premium.atresplayer.com/clipping/cmsimages02/2024/02/02/75C28FDA-2D52-48DB-ABCE-7460DF9B9AD6/muerto-flotando-tiburones-nuevo-misterioso-caso-luis-naira_70.jpg?crop=1510,849,x0,y0&width=480&height=270&optimize=high&format=webply)
Publicidad
Es una mañana cualquiera en Villa Azul, un precioso acuario de Tenerife. El público se amontona en la entrada para coger su entrada y poder visitar a los impresionantes animales que viven aquí.
“Y ahora entramos en la zona de mar abierto”, oímos decir a Pilar, una de las guías. La joven va acompañada por un pequeño grupo al que va explicando curiosidades sobre los animales y el acuario.
Entre las personas a las que acompaña, se encuentra una mujer que, emocionada, corretea de un lado a otro haciendo fotos a todo animal con el que se cruza. “Sin separarse del grupo, por favor”, le pide educadamente Pilar.
Llegan por fin a la sala principal del acuario, donde se puede ver a los animales de mayor tamaño: tiburones, rayas, tortugas… Una imagen espectacular. Pilar pide al grupo ser más silenciosos aquí y que las fotos y vídeos sean sin flash, para no molestar a las bellas criaturas.
Pero la señora no escucha: ella sigue haciendo fotos con su móvil sin percatarse de que está usando flash. Pilar empieza a ponerse nerviosa con ella.
De pronto, Pilar se percata de la presencia de alguien muy especial: Anselmo, una de las manta rayas, y explica su historia. La señora comienza a golpear el cristal, como intentando llamar la atención de algún animal. Pilar vuelve a insistirle: “No golpee el cristal”.
Pero, según se gira Pilar, la visitante pega un grito ensordecedor. La guía se gira y se queda helada al descubrir el cadáver de un hombre flotando entre los animales acuáticos, que siguen nadando tranquilos. ¿Cómo ha podido suceder?
Publicidad