Una tragedia en el paraíso: “Hay un asesino en esta isla”

Un islote paradisíaco en mitad del océano Atlántico. Un hotel de lujo lejos de la ciudad, el ruido y de cualquier problema… El paraíso, dirían algunos. Pero todo está a punto de cambiar.

Poco después del terrible incidente en Madrid, el inspector Luis Lacasa se ha trasladado hasta este bonito resort para olvidar un poco todo aquello junto a su buen compañero y amigo, Ramón. Ambos están disfrutando de unas merecidas vacaciones. O, más bien, Ramón, porque Luis está de suspensión disciplinaria tras lo ocurrido.

Lacasa no es capaz de relajarse, no olvida todo lo sucedido aquel día. Ramón sólo quiere que su amigo se relaje y se tome esto como unas vacaciones y una oportunidad para reconectar con Jimena, su hija que vive en Tenerife.

Por la noche, de pronto, la felicidad y la celebración cambia. Un hombre recorre los jardines del resort con la camisa ensangrentada y las manos protegiendo su torso. Todo aquel con el que se va cruzando alucina con lo que ve. Le intentan ayudar, pero él no se detiene. Huye de algo… ¿Pero de qué?

Llega hasta el mirador en lo alto del precipicio. Una joven advierte que se va a caer por el acantilado. Una roca se desprende y sucede la tragedia. Luis y Ramón llegan corriendo, advertidos por los gritos de los testigos. Ya no se puede hacer nada. Hay que llamar a la policía.

"Hay un asesino en esta isla".